La crisis está cambiando nuestros hábitos

El último informe de Crédito y Caución pone de manifiesto que en 2012 las ventas minoristas en España descendieron un 10,2%, y la demanda de bienes duraderos registró el mayor descenso desde el inicio de la crisis económica.

El ajuste prolongado en el sector inmobiliario en España ha tenido un efecto negativo en la compra de electrodomésticos. El volumen de negocio de la industria del mueble ha tenido mejor comportamiento, con crecimientos en el 2º semestre de 2012 debido a las ventas nacionales previas a la subida del IVA y a una creciente demanda extranjera.

El deterioro del mercado laboral, la caída de ingresos disponibles, y la incertidumbre hacen que la disminución general del gasto real de los hogares esté provocando cambios en los hábitos y preferencias del consumidor, que da prioridad a la alimentación, la salud y la educación frente al gasto en bienes de consumo duraderos. De cara a 2013 se prevé que el consumo privado se contraiga un 2,3% adicional, por la disminución del crédito al consumo y de la renta bruta disponible en los hogares.