Seguros para películas, cortos y series

La producción de películas, cortos y series de televisión cuesta mucho dinero y cualquier siniestro puede suponer pérdidas millonarias para los productores.

El rodaje de una película, corto o serie supone un gran desembolso de dinero por parte de las empresas audiovisuales. El sueldo de los actores, cámaras, guionistas, las localizaciones o el vestuario convierten a las producciones en proyectos millonarios. Un sólo episodio de Juego de Tronos puede costar 6 millones de dólares, mientras que uno de Big Bang Theory, serie de menor presupuesto, ronda los 2 millones. Por otro lado, uno de Breaking Bad costaba a la productora alrededor de 3 millones.

Además del precio desorbitado que cuesta un rodaje, éste suele extenderse bastante en el tiempo, algo que suelen sufrir los fans de míticas sagas como Star Wars. Un siniestro durante su producción puede hacer perder mucho dinero a las compañías cinematográficas. Por ello, las producciones se suelen asegurar mediante pólizas especializadas en la industria audiovisual.

Pérdida del actor principal

El rodaje de una película no está exento de siniestros. Perder a uno de los actores principales antes de finalizar el filme es uno de los mayores miedos de los productores. Esto ha ocurrido varias veces, una de ellas fue en 2008, cuando el actor Heath Ledger se suicidó antes de acabar la grabación de la película El imaginario del doctor Parnassus. El director tuvo que solventar el problema utilizando hasta tres actores más para encarnar al protagonista principal. Johnny Depp, Jude Law y Colin Farrell fueron los elegidos para sustituirlo en la cinta póstuma.

Otro de los casos más conocidos en el terreno de estos siniestros es el de Paul Walker en la última película A Todo Gas 7. El actor murió en noviembre de 2013, antes de finalizar el rodaje de la superproducción. Para seguir grabando las escenas en las que aparecía el agente encubierto Brian O’Conner, al que daba vida el intérprete fallecido, utilizaron imágenes creadas por ordenador mediante la técnica CGI (Computer Generated Imaginery). Esta tecnología ya se utilizó hace más de 20 años para grabar la película El Cuervo, en cuyo rodaje murió Brandon Lee, hijo del también actor Bruce Lee. Mientras el intérprete actuaba, una de las pistolas que debía ser de fogueo disparó una bala real que acabó con su vida.

Seguros de buen fin

Ante la pérdida de actores en un filme, existe un tipo de seguro que cubre el siniestro que pueda provocar esta eventualidad. El seguro de Buen Fin garantiza la financiación y sustitución de personas o materiales si se produjese un siniestro durante la grabación de la película. Entre otras cosas, esta póliza también garantiza a las productoras que la película se realizará ajustándose al presupuesto y dentro del plazo de tiempo previsto.

Este tipo de seguro es bastante difícil de conseguir, puesto que no todas las  aseguradoras lo ofrecen. Son pocas las compañías que garantizan a los productores que la película se grabará según el presupuesto y el plan estipulado. No obstante, el seguro es bastante conocido en los Estados Unidos, donde lo contratan muchas productoras que adelantan la financiación de la película con cargo a los derechos de emisión.

Seguros Multirriesgo y de Responsabilidad Civil

Además de la posibilidad de perder a uno de los actores del reparto, las producciones audiovisuales tienen muchos más riesgos. Por este motivo, existen pólizas Multirriesgo y de Responsabilidad Civil que ofrecen aseguradoras especializadas en el sector. Las garantías que incluyen estos seguros  son variadas y van desde los daños derivados de la producción, como los accidentes personales del director y los actores, a la responsabilidad civil por daños que se produzca en la grabación.

Además, también pueden incluir la pérdida o deterioro de los negativos de la película, los daños sufridos por aparatos o accesorios cinematográficos y la suspensión del rodaje por inclemencias meteorológicas.

Seguros directos

Los seguros directos suelen cubrir los daños típicos sufridos en un rodaje, además de los riesgos de producción del filme. Dentro del condicionado de la póliza se suelen incluir los decorados, vestuario, equipamiento, material defectuoso, derechos de la propiedad intelectual e incluso el incumplimiento de la confidencialidad. Este último siniestro puede darse cuando un actor o trabajador implicado en la producción de la película filtra un guión y acaba publicado por la prensa. Este siniestro se ha dado más de una vez en el mundo del cine. El año pasado se filtró en Internet el guión de The Hateful Eight, un filme que en principio iba a ser dirigido por Tarantino, pero que finalmente acabó por cancelarse tras la filtración en varios medios de comunicación.

Compara antes de contratar un seguro

 Los seguros para producciones cinematográficas suelen realizarse a medida para la película, corto o serie que se vaya a realizar. No obstante, conviene revisar las coberturas y garantías que ofrecen las distintas aseguradoras para contratar el seguro que más se adapte a tus necesidades. Para ello, es recomendable comparar entre todas las compañías y cerciorarse de cuál ofrece los mejores servicios y precios. Si quieres ahorrar dinero y tiempo a la hora de buscar tu seguro para tu película o corto puedes utilizar el Comparador de Seguros.es