El carburante, gran despiste de los conductores

Uno de los errores más comunes de los conductores es echar gasolina en lugar de diesel, o viceversa, a la hora de repostar. A ello le sigue olvidar las llaves en el interior del coche cerrado o ignorar las indicaciones de los testigos luminosos.

Equivocarse a la hora de repostar es la negligencia más común (41%): Echar gasolina en lugar de diesel, o viceversa, impide funcionar al motor y requiere una limpieza completa de las bujías y del circuito.

El I Informe de Mantenimiento de LeasePlan señala que otras son olvidar las llaves en el interior del vehículo cerrado (25%) e ignorar deliberadamente los testigos luminosos que aparecen en el salpicadero y que indican que algo no funciona bien en el vehículo (23%).

No limpiar el barro acumulado en los bajos del vehículo (5%), no evitar el sobrecalentamiento del motor (3%) o no cumplir con las revisiones de mantenimiento fijadas por el fabricante (2%) son también negligencias habituales.